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Delitos en la red: difusión de contenido íntimo no consentido

Delitos en la red: difusión de contenido íntimo no consentido

El aumento en el uso de los dispositivos móviles y las redes sociales está ayudando a que proliferen nuevos delitos en la red. El legislador ha tenido que adaptar el Código Penal español para perseguir esta nueva forma de cometer delitos que afectan, sobre todo, a una población joven que ignora las consecuencias jurídicas que estas actuaciones conllevan. 

Una de las formas delictivas que destaca entre jóvenes y adultos a través de los medios digitales es la de difusión de contenido íntimo de otra persona sin autorización de ella. Algunos de los anglicismos que definen estas prácticas son:

Grooming: práctica que consiste en captar la atención de un menor con ánimo de crear un vínculo emocional o afectivo con el objetivo de llevar a cabo conductas o acciones de pederastia. 

Sexting: práctica que hace referencia al envío de contenido erótico o sexual a través de aplicaciones de mensajería instantánea. 

Ciberbulling: práctica que consiste en acosar a una persona a través de redes sociales u otras aplicaciones digitales mediante ataques a su honor e intimidad, difamaciones o amenazas. 

En cualquier caso, debemos tener en cuenta que, aunque exista consentimiento inicial en el momento de toma de fotografías o vídeos de contenido íntimo o privado, es ilegal el reenvío o difusión posterior sin el consentimiento del afectado.  En este sentido, el artículo 197.7 del Código Penal establece que compartir contenidos privados de terceras personas por medios digitales sin su autorización, puede constituir un delito contra la intimidad, con la agravante de relación de afectividad o de que la víctima sea menor de edad.  

¿Qué debemos hacer si recibimos una grabación con contenido íntimo?

En el caso de recibir una imagen o grabación de contenido íntimo o privado, se deberá denunciar ante la Policía Nacional o ante la Unidad de Delitos Telemáticos de la Guardia Civil a través de su página web. 

La persona que recibe las imágenes debe tener en cuenta que no solo será autor del delito el que realiza el primer envío, sino que cometerán delito todas aquellas personas que participen en su envío y agraven de la difusión del contenido. 

En caso de que se encuentre con una situación de este tipo y tenga dudas sobre cómo proceder, no dude en contactar con nosotros para recibir asesoramiento legal. 

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